Problema
“Hábitos alimenticios en los
niños (6-12 años)”
Planteamiento del problema
Hábitos alimenticios en los
niños (6-12 años)”
Pregunta inicial:
¿De
qué manera influyen los hábitos alimenticios en el rendimiento de los alumnos?
Se sabe que los hábitos de orden y
disciplina entregados por los padres a sus niños desde temprana edad es un
factor determinante para un buen rendimiento escolar. Sin embargo, tomar un
desayuno adecuado y consumir colaciones y almuerzos saludables en el colegio no
solamente influyen en el peso del niño: su alimentación tiene que ver
directamente en su concentración durante la jornada.
Para desempeñar actividades que
impliquen memorizar y pensar activamente, el cuerpo necesita ciertos minerales
y vitaminas que se adquieren mediante una buena alimentación. Sales minerales como ácidos grasos esenciales
y oligoelementos, así como vitaminas de los grupos B, E y C, son fundamentales
para un correcto funcionamiento cerebral. Asimismo, su presencia en el
organismo incide en el estado de ánimo del niño.
Recomendaciones
para el mejor desempeño del niño:
El consumo de frutas, fibras y carnes
blancas son prácticas alimenticias que promueven un buen rendimiento intelectual.
El desayuno, al ser la comida más
importante del día, debe estar compuesto por cereales sin azúcar o avenas. En
cuanto a la colación, se recomienda lácteos descremados. Asimismo, otra buena
alternativa son panes con acompañamientos con bajo contenido calórico, como
verduras y aves. La idea es enviar la colación desde casa y no darles dinero a
los niños para que ellos mismos la compren, evitando que adquieran alimentos no
saludables.
Además de proporcionar este tipo de
alimentos, es aconsejable que los padres prescindan de bebidas gaseosas y
golosinas en casa. Además, no deben usar la comida como premio, en especial la
comida chatarra.
El menor debe consumir alimentos de una
densidad energética elevada solo un día de la semana, como pizzas o completos.
Se recomienda escoger un día y hacerlo con moderación. Las frituras también
pueden evitarse, preparando la comida al horno.
El tipo de colación y la porción debe
ser proporcional al gasto energético que realice el niño y a su estado
nutricional.
Preguntas secundarias:
1-De
acuerdo a los alimentos que ofrecen las escuelas en conjunto con los padres de
familia. ¿Cuáles son los hábitos alimenticios que se ven reflejados en los
alumnos?
En la actualidad en la mayoría de la
población infantil en edad escolar es evidente el desarrollo de una serie de
malos hábitos alimenticios, como el aumento en el consumo de comida chatarra y
procesada, mientras que la comida casera y los alimentos de origen natural
parecen estar siendo eliminados.
Al parecer, las nuevas generaciones no
está al tanto de estas opciones alimenticias, que podrían ayudarles a lograr un
mejor desempeño, tanto en la escuela como en su vida diaria.
En algunas instituciones educativas,
las familias carecen de recursos económicos, por ende los niños acuden a la
escuela sin dinero para adquirir un producto nutritivo, en ocasiones solo les
alcanza para una bolsa de frituras o jugos con exceso de azúcar, además que la
cooperativa solo ofrece alimentos instantáneos y poco saludables, a los que los
niños se adaptan con facilidad.
Debido a que las nuevas dinámicas
familiares y la gran exposición de los niños a los comerciales alimentarios han
modificado los patrones de consumo de los niños originando con ello el aumento
de la obesidad infantil.
2-¿Cuál
es la importancia de los buenos hábitos de alimentación en los niños?
Alimentar de forma saludable a los
niños representa un gran reto porque no siempre contamos con la información
adecuada para hacerlo bien y, en ocasiones nos dejamos llevar por hábitos que
no necesariamente son correctos.
Mantener una alimentación saludable
durante la infancia es uno de los factores más importantes para contribuir a un
adecuado crecimiento y desarrollo de los niños. La adopción de hábitos
alimenticios saludables en los niños ayuda a prevenir el sobrepeso y la
obesidad; la desnutrición crónica, el retardo del crecimiento, la anemia, entre
otros.
Un niño bien alimentado tiene más
energía para un mejor desempeño escolar y en la actividad física. Para
facilitar la adopción de buenos hábitos de alimentación, es importante que
consideres como tus responsabilidades:
- Seleccionar y comprar los alimentos.
- Regular el horario de las comidas.
- Ofrecer los alimentos de manera que el niño
pueda manejarlo.
- Hacer agradable el tiempo de la comida.
- Apoyar al niño para que participe en las
comidas familiares.
- Establecer reglas de comportamiento en la
mesa.
- Determinar el horario y lugares donde se
come.
En este sentido, las responsabilidades
de los niños consisten solamente en decidir si comen o no y, la cantidad de
alimento que comen. Algunos consejos importantes que deben de tomar en cuenta
son:
•Considera la variedad en sabores,
olores, formas y consistencias, ya que un plato bien preparado siempre
despierta el interés de los niños y estimula las ganas de comer.
•Incluye en su dieta verduras y frutas
(5 porciones al día).
•Ayudarlos a que consuman suficientes
cereales, ofréceles de preferencia los que sean integrales para cubrir sus
necesidades de fibra. Recuerda que los cereales les proporcionan la energía que
necesitan para realizar las actividades diarias. Ejemplos de cereales son:
tortilla, pan, cereales para el desayuno, pastas para sopa, papas, galletas,
entre otros.
•Asegurarse de que consuman leche todos
los días y sus derivados como queso, yoghurt, etc., de preferencia productos
bajos en grasa.
•Acostúmbralos a que conozcan y consuman
alimentos tradicionales de nuestro país como frijoles, tortillas, nopales,
jitomate, maíz, etc.
•Los niños aprenden por imitación, si
los padres no acostumbran consumir verduras, seguramente sus hijos tampoco lo
harán.
•Sirve raciones pequeñas que se puedan
terminar, recuerda que un niño no debe consumir las mismas cantidades que los
adultos. Si quiere más, permite pedir más.
•Ofrécele alimentos sin forzarlo o
condicionarlo a que los consuma, al hacerlo crearás una actitud negativa hacia
los alimentos. Dales la libertad de decir que no, pero motívalos a comer de
todo.
•Ejemplos de lo que no es recomendable
decir: si te lo comes puedes comer postre, salir a jugar, ver televisión.
•Cree en ellos cuando te dicen que ya
están satisfechos.
•Es importante que mientras comen
exista un ambiente agradable y de
convivencia familiar, no permitas que el niño juegue en la mesa o que vea la
televisión mientras come.
La mejor manera de que un niño obtenga
los nutrimentos que necesita para alcanzar su potencial de crecimiento y
desarrollo es, ofreciéndole una amplia variedad de alimentos que le resulten
agradables basándonos en el consumo de una dieta variada que incluya alimentos
de todos los grupos (cereales, frutas y verduras).
Los
buenos hábitos alimenticios nos ayudan a:
•Disminuir
los niveles de estrés: Nos sentiremos dueños de las decisiones relacionadas con
lo que elegimos para comer, aumentaremos la autoestima y disfrutaremos de los
beneficios de los alimentos adecuados.
•Comer
con moderación: Comer en exceso lleva a la obesidad y es un hábito
autodestructivo. La moderación es el antídoto para una acción que puede llegar
a ser compulsiva.
•Perder
peso y mantenerlo en el tiempo: Esto es un logro que muchos quisieran y que
vale la pena intentar.
•Evitar
los cambios de humor: Ellos se producen cuando se ha comido compulsivamente.
Debemos tener especial cuidado con los alimentos de alto índice glicémico (que
aumentan bruscamente la glucosa sanguínea), ya que producen una descarga de
insulina posterior, llevando de la euforia momentánea a una sensación de
aletargamiento posterior.
•Vencer
la adicción a la comida: Así controlaremos mejor cuánta comida ingerimos. Se
trata de comer con hambre (necesidad de comida) y no comer con apetito
descontrolado, que equivale a deseo de comida por causas emocionales.
Una
buena dieta diaria
Si comes en casa, en restaurantes o
pides comida a domicilio, es posible llevar una dieta balanceada y sana. Sólo
es suficiente un poco de control y cuidado en la elección de los menús.
Aprender a consumir alimentos variados y elegir alimentos más saludables (con
poca grasa), no nos demanda más tiempo. Aquí te mostramos cómo:
1.
Desayuno:
Es importante comenzar el día con un buen
desayuno, pero la calidad del mismo depende de las raciones que decidamos
consumir de cereales, lácteos y frutas para mantener a lo largo de la mañana un
mejor perfil nutricional. Un desayuno con alto contenido graso, pocas proteínas
y fibras, se asocia con mayor sensación de hambre y fatiga a las pocas horas de
haberlo consumido.
2.
Almuerzo:
En el almuerzo podemos variar más las
opciones. Para la entrada o primer plato puedes escoger:
•En
verano una abundante ensalada de hojas verdes. Puedes agregarle tomate,
zanahoria, pepino, repollo blanco o morado etc.
•En
invierno, una sopa de verduras desgrasada.
•Podemos
optar por una porción de 120 gramos de carne roja o blanca, o 200 gramos de
pescado.
•Cocínalas
a la parrilla o al horno de preferencia.
•Las
verduras al vapor también puede ser una buena alternativa para completar el
menú.
3.
Postre:
El postre más recomendado es la fruta,
que puede ser preparada como ensalada o tuti fruti. Evita consumirla cuando
contengan algún componente graso como crema o dulce, aunque no está mal darte
un gusto de vez en cuando con tu postre favorito.
3-¿Cuáles
son los principales causantes de los malos hábitos alimenticios de los niños?
Los hábitos alimenticios de las
familias se transmiten de padres a hijos y están influidos por varios factores
entre los que destacan: el lugar geográfico, el clima, la vegetación, la
disponibilidad de la región, costumbres y experiencias, por supuesto que
también tienen que ver la capacidad de adquisición, la forma de selección y
preparación de los alimentos y la forma de consumirlos (horarios, compañía).
En la infancia se crean los hábitos
alimenticios, y más aún las enfermedades que pueden aparecer más tarde, a lo
largo de la vida como; la obesidad, la diabetes, las enfermedades cardíacas,
cáncer, las que comienzan a incubarse desde los primeros años de edad. Por
estas razones es que parece fundamental prevenirlas desde los primeros años, lo
que es importante cuidar la adquisición de hábitos alimenticios adecuados.
Los principales causantes de los malos
hábitos alimenticios de los niños pueden variar, pero los causantes más comunes
pueden ser:
•Las
reglas al momento del comer
Ocurre
con mucha frecuencia que los padres no establecen ninguna norma a la hora de
comer para controlar la disciplina de sus hijos durante las comidas.
•Hora
de comer
En
algunos hogares suele ocurrir que, por una razón u otra, no hay horas fijas
para comer, por lo que el niño tiende a comer en exceso. Además, las comidas
que se hacen entre cada una de las tres principales suelen ser de alimentos que
no tienen mucho contenido nutricional, lo que causa que el niño coma mucho pero
no se esté alimentando bien.
•La
elección de los alimentos
Suele
ocurrir que los padres eligen siempre los mismos alimentos, por lo que el niño
tiende a perder nutrientes necesarios para su crecimiento, además de que se
acostumbra a comer siempre lo mismo.
•Cómo
promover la alimentación
Muchos
padres no saben cómo reaccionar adecuadamente ante la negativa de sus hijos en
no comer los alimentos que les prepararon. Por esta razón, los padres tienden a
recurrir a formas que sólo provocan una respuesta negativa del niño. Estas
formas suelen ser: obligarlo a comer la comida, servirle una porción más
grande, castigarlo, etc.
•Acelerar
el proceso de comer
Hay
niños que son más lentos a la hora de comer y algunos padres no saben cómo
lidiar con ello, por lo que tienden a acelerar el proceso de alimentar al niño.
•Utilizar
sobornos
Muchos
padres utilizan la técnica de darle premios al niño o distraerlo para que coma
su comida, sin embargo, esto sólo es una solución a corto plazo. Además, esta
técnica no le permitirá a que el niño aprenda unos buenos hábitos alimenticios.
4-¿Qué
tipos de trastornos alimenticios son más comunes en las escuelas?
Los
trastornos alimentarios son tan comunes en los niños, ya que 1 o 2 de cada 100
estudiantes padecen uno de estos trastornos. Cada año, miles de adolescentes
padecen trastornos alimenticios o problemas de peso, de alimentación o con la
imagen corporal.
Un trastorno alimentario implica más
que simplemente hacer dieta para perder peso o hacer ejercicio todos los días.
Se trata de comportamientos alimentarios extremos: por ejemplo, dietas que
nunca terminan y que, gradualmente, se vuelven más estrictas. También guarda
relación con personas que no salen con amigos porque creen que es más
importante salir a correr para contrarrestar el dulce que comieron más
temprano.
Los trastornos alimentarios más comunes
son la anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa (más conocidas como
"anorexia" y "bulimia"). Pero existen otros trastornos
relacionados con la alimentación que se están volviendo más comunes, como el
trastorno por atracón, los trastornos relacionados con la imagen corporal o las
fobias a determinados alimentos.
Anorexia
Las personas que padecen anorexia
sienten un miedo real a engordar y tienen una imagen distorsionada de las
dimensiones y la forma de su cuerpo. Es por esto que no pueden mantener un peso
corporal normal. Muchos adolescentes con anorexia restringen la ingesta de
alimentos haciendo dieta, ayuno o ejercicio físico excesivo. Apenas comen, y lo
poco que ingieren se convierte en una obsesión.
Otras personas que padecen anorexia
recurren a los atracones y las purgas: ingieren grandes cantidades de alimentos
y luego tratan de deshacerse de las calorías induciendo el vómito, tomando
laxantes, haciendo ejercicios físicos en exceso, o mediante una combinación de
estas.
Bulimia
La bulimia es similar a la anorexia. En
el caso de la bulimia, quien la padece se da grandes atracones de comida (come
en exceso) y después trata de compensarlo con medidas drásticas, como el vómito
inducido o el ejercicio físico en exceso para evitar subir de peso. Con el
tiempo, esto puede resultar peligroso, tanto física como emocionalmente.
También puede conducir a comportamientos compulsivos (es decir, comportamientos
que son difíciles de evitar).
Las personas bulímicas comen grandes
cantidades de comida de golpe (generalmente comida chatarra) y suelen hacerlo a
escondidas. Con frecuencia comen alimentos que no están cocidos o que aún están
congelados, o sacan comida de la basura. Suelen sentir que no pueden dejar de
comer y solo lo hacen cuando están demasiado llenos como para seguir comiendo.
La mayoría de las personas que padecen bulimia luego recurren a los vómitos, a
los laxantes o al ejercicio físico excesivo.
Si bien la anorexia y la bulimia son
muy similares, las personas anoréxicas suelen ser muy flacas y suelen tener un
peso inferior al normal. Por el contrario, las personas bulímicas pueden tener
un peso normal o estar un poco excedidas de peso.
Obesidad
México actualmente ocupa el primer
lugar mundial en obesidad infantil, esto a raíz de malos hábitos alimenticios. Las
causas de la obesidad son muy variadas, ya que pueden ser por factores
genéticos, metabólicos, psicológicos y sociales entre otros, pero lo que posee
la mayor influencia es el advenimiento de nuevos e inadecuados hábitos de
alimentación así como el sedentarismo
característico de la vida moderna.
Los niños que padecen esta enfermedad
"son en su mayoría niños con carácter más dependiente, impresionable,
sobreprotegido, poco expresivo, sumiso y prudente, inadaptación y malestar
personal; pueden presentar depresión, ansiedad, baja autoestima, sentimientos
de poco valor, bajo rendimiento escolar, fatiga, sentimientos de culpa y
abandono; problemas de conducta, agresividad, cambios de comportamiento y del
estado de ánimo e inseguridad y que tratan de llamar la atención comiendo ya
que sienten que nadie los quiere", dijo la especialista.
Al parecer, las nuevas generaciones
no está al tanto de estas opciones alimenticias, que podrían ayudarles a lograr
un mejor desempeño, tanto en la escuela como en su vida diaria.
Por lo tanto llevar una alimentación
excesiva produce enfermedades como obesidad, diabetes, trastornos
cardiovasculares, hipertensión arterial y algunos tipos de cáncer. La
alimentación deficiente ocasiona desnutrición, anemia, entre otras
enfermedades.
5-¿De
qué manera se pueden erradicar los hábitos alimenticios?
Hoy en día muchas enfermedades se
pueden prevenir a través de una dieta adecuada, sin embargo existe también una
gran confusión y muchos mitos sobre la que puede ser "la dieta
adecuada" y por lo tanto los niños no practican el plato del buen comer y
jarra del buen beber.
Una dieta adecuada se logra con la
ingestión adecuada en cantidad y calidad de verduras, frutas, carnes y
cereales, por ello evita cometer los siguientes errores:
1.-
No te saltes alimentos. No se dan tiempo de comer lo que repercute
negativamente en las acciones metabólicas. Cuando se deja de comer el cuerpo se
defenderá y comenzará a gastar menos energía, y como no sabe cuándo va a comer
e nuevo, en el momento de ingerir algo, seguirá ahorrando energía, lo que
facilitará el aumento de peso. Además el consumo será mayor en el próximo
alimento. Está comprobado que el no comer afecta el estado físico y mental, y
se presentan entro otros efectos mareos, cambios de humor y falta de
concentración. El cuerpo necesita ingerir alimentos tres veces al día,
suficientes, higiénicos, variados para obtener las calorías y los nutrimentos
suficientes.
2.-
No comas de forma apresurada, mastica cada bocado varias veces y así ayudarás a
que el cuerpo absorba todos los nutrimentos y evites problemas de
estreñimiento. Tampoco es bueno comer grandes bocados, hay que partirlos en
pequeños trozos que puedan ser masticados bien. Al masticar varias veces la
saliva elimina algunas bacterias que contienen los alimentos y nuestro estómago
se prepara mejor para recibir el bolo alimenticio.
3.-
Hay que evitar caer en el mito de los alimentos light, ya que si bien contiene
menos grasa y azúcar, no están libre de calorías y como se piensa que no
engordan, se consumen en mayor cantidad.
4.-
Evita comer mientras ves la televisión o estudias. Es recomendable que la hora
de la comida sea agradable, y que se le dedique toda la atención, de manera que
nuestro cuerpo pueda emplear toda la energía en asimilar de manera adecuada los
alimentos lo que fomenta una buena digestión. Al distraernos se descuidan
detalles como el tamaño de los alimentos, la buena masticación, y la cantidad
de alimentos que vamos ingiriendo.
5.-
Las frutas y verduras son el grupo de alimentos que mayor cantidad de
nutrimentos aportan al organismo y los que contienen menos grasas, sin embargo
se deben combinar con otros alimentos como carnes y cereales.
6.-
Tener orden en los alimentos es muy importante, hay personas que se saltan el
desayuno, por falta de tiempo o costumbre cuando es precisamente éste el que va
a proveer al cuerpo de la energía suficiente para trabajar y estudiar el resto
del día, y por el contrario la cena debe ser ligera para descansar bien, ya que
el cuerpo en reposo quema pocas calorías, lo que ayuda a aumentar de peso.
7.-
No ponga sal en los alimentos antes de probarlos, consumirla en exceso da sed,
lo que obliga a tomar mucho agua y puede favorecer el desarrollo de
hipertensión por la retención de agua. Para evitar esta tentación se pueden
quitar los saleros de la mesa.
8.-
No se debe dejar de consumir pan, cereales, tortillas y pastas sobre todo si
son integrales, ya que aunque tienen
mala fama, son la base de una alimentación adecuada, ya que contienen fibra. La
pasta preparada con ingredientes naturales como aceite de oliva, verduras o
hierbas es muy saludable.
9.-
Comer cuando no se tiene hambre o no es hora de hacerlo es uno de los hábitos
alimenticios más nocivos para la salud, sobre todo si en lugar de elegir una
fruta, se consumen galletitas o fritangas que quitan el hambre y no nutren. Hay
personas que deben realizar tres comidas y dos colaciones, como los diabéticos,
hipoglucémicos o los atletas, que por su gasto calórico requieren de mayor
cantidad de alimentos al día.
10.-
A pesar de que la azúcar aporta energía a los niños, no es así con los adultos,
por lo que se debe medir su consumo, pero si el antojo es mayor, una opción es
la utilización moderada de edulcorantes, o el consumo de alimentos de origen
natural como la miel de abeja o las frutas secas.
6-Por
parte de las instituciones públicas de salud. ¿Qué programas ofrecen para
mejorar los hábitos alimenticios?
Algunos de los programas que
ofrecen ayuda son:
Programa
de Alimentación Escolar (PAE)
El Programa de Alimentación Escolar es
un Programa de Inversión Social, tiene como propósito esencial garantizar la
atención alimenticia y nutricional a la población de niños, niñas, adolescentes
y jóvenes estudiantes del Sistema Educativo, enmarcada en la visión integral y
holística de la Educación, como continuo humano, desde una perspectiva
humanista y de protección integral donde la acción pedagógica pertinente,
fortalece y trasciende a la “Escuela” en su función pedagógica, al potenciar su
compromiso y misión de formar los ciudadanos y ciudadanas de la nueva
República.
Misión:
Contribuir al ingreso, permanencia,
prosecución y rendimiento escolar a través del mejoramiento de las condiciones
nutricionales de los niños y niñas, adolescentes y jóvenes atendidos en el
Sistema Educativo Bolivariano, mediante el suministro de una balanceada y
apropiada ingesta alimentaría, adecuada al grupo etéreo, al turno y/o régimen
escolar y a las características socio-culturales de su entorno, así como la
época del año. Con la participación consciente y responsable de los y las
docentes, las familias, la Comunidad Educativa y la comunidad organizada y el
fortalecimiento a la economía social a través de la incorporación de
cooperativas, microempresas, asociaciones y concesionarias.
Visión:
Total cobertura de la población escolar
atendida por el Ministerio del Poder Popular para la Educación a través del
Programa de Alimentación Escolar, en el marco de una gestión participativa y
democrática, donde los beneficiarios y la comunidad en general se incorporan de
manera activa y consciente al seguimiento, evaluación y control de la ejecución
del Programa, como una expresión concreta del ejercicio de la Contraloría
Social, en un clima de responsabilidad y compromiso según las competencias de
cada instancia o institución, para garantizar el mejoramiento permanente de la
calidad del servicio alimentario al disminuir los índices de desnutrición en la
población escolar atendida por el Sistema Educativo Bolivariano, y la
incorporación del componente pedagógico al Programa.
Objetivo
General:
Garantizar una alimentación diaria,
variada, balanceada, de calidad y adecuada a los requerimientos nutricionales,
calóricos y energéticos específicos a cada grupo etéreo, y al turno y/o régimen
escolar, a través de un menú y dieta contextualizada, con pertinencia
socio-cultural y en correspondencia con la disponibilidad de los productos e
insumos alimenticios característicos de las regiones, y al mismo tiempo
promover una acción pedagógica que permita que este acto se convierta en una
experiencia educativa para la formación de hábitos alimentarios en la población
escolar atendida por el Sistema Educativo Bolivariano y el desarrollo de los
componentes pedagógicos en materia de seguridad alimentaria, con la
participación de los docentes, la familia y la comunidad.
México es el país con mayor número de
personas que padecen obesidad en el mundo. Este problema representa un serio
reto de salud para el gobierno y la población mexicana en general, por ello se
han generado programas, acuerdos y campañas en pro de fomentar el hábito del
ejercicio y de una dieta saludable que contribuyan a cambiar este panorama.
Acuerdo
Nacional para la Salud Alimentaria:
A nivel federal, se creó el Acuerdo
Nacional para la Salud Alimentaria, Estrategia para el Sobrepeso y la Obesidad,
convocado desde la presidencia y firmado por quince dependencias públicas,
instituciones académicas y organismos empresariales nacionales que tienen que
ver con los alimentos y bebidas no alcohólicas, la producción agrícola,
industrialización, comercialización, venta y consumo de alimentos así como
instituciones de representación municipal en salud y organismos sociales
representantes de las profesiones de salud, sindicatos y de la sociedad civil
organizada.
En este sentido se comenzó por la
modificación al reglamento de las escuelas para disminuir la venta de comida
chatarra a los estudiantes pero esto no es la solución al problema si
consideramos que los niños pueden llevar botanas en la lonchera o comer
frituras fuera de las instalaciones académicas. Los buenos hábitos alimenticios
fomentados desde el hogar son primordiales para evitar que la obesidad siga
extendiéndose entre la población infantil.
En televisión y radio se dio difusión a
una campaña llamada “5 Pasos”, que promueve la adopción de hábitos saludables
de forma sencilla y fácil de recordar. Las cinco recomendaciones son:
1.
Actívate,
2.
toma agua,
3.
come frutas y verduras,
4.
mídete y
5.
comparte.
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